Es una costumbre muy asentada dentro del mundo de los videojuegos, la realización de distintos «spin offs» de los personajes más carismáticos de los mismo. De esta manera, se toman los personajes de ciertos videojuegos y terminan siendo protagonistas de otros videojuegos en un contexto (y en ocasiones género) totalmente distinto al del videojuego original. En este tipo de desarrollos, los mejores ejemplos los encontramos con Mario (Mario Kart, Mario Paint, Dr. Mario…) y Sonic. Precisamente, es un juego derivado de este último, el que hoy analizamos: Sonic the Hedgehog Spinball. El videojuego sería distribuido por la propia SEGA y desarrollado por un equipo conocido como SEGA Technical Institute (unos estudios ubicados en EEUU), siendo publicado en 1993 para Mega Drive, Master System y Game Gear. Tal y como puede deducirse del título, nos encontramos con un videojuego que simula las conocidas «máquinas del millón» o «pinball», pero con la peculiaridad de que, en lugar de la típica bola metálica, será el propio Sonic al que tendremos que golpear con los flippers. Como curiosidad, podemos decir que fue el único juego basado en el famoso erizo azul que fue desarrollado íntegramente en EEUU.
El doctor Robotnik se ha hecho con el control del monte Moubius y lo ha convertido en su base mecánica, de tal manera que pretende usar toda la potencia del magma del volcán para transformar animales en esclavos robóticos. Esto provoca que Sonic y Tails vuelvan a la carga a bordo de su aeroplano, pero Sonic es abatido por un disparo, cayendo al agua y siendo llevado a la zona subterránea de la fortaleza del doctor Robotnik. Para destruirla, Sonic tendrá que provocar la erupción del volcán, haciéndose con las distintas Esmeraldas del Caos que se encuentran en la misma.
El juego cuenta con cuatro mesas principales de pinball: Toxic Caves, Lava Powerhouse, The Machine y Showdown; aunque existen niveles extras entre nivel y nivel, con una máquina de pinball «real», manejada por el propio Sonic. Tendremos que utilizar los distintos mecanismos del pinball para ir accediendo a las distintas mesas y accionar los mecanismos para liberar las distintas esmeraldas. La principal diferencia con otros pinballs, radica en que nuestra «bola» no va a depender únicamente de la física, sino que podremos forzar movimientos de Sonic para nuestro propio interés (sobre todo a la hora de que se pierda por la zona inferior donde, con un hábil movimiento, podremos hacer que Sonic se enganche a un saliente y salvar una vida).
A nivel técnico vemos de forma clara la diferencia de estudio desarrollador. Respecto al apartado gráfico, prácticamente la única similitud respecto a la saga original sea el diseño de los personajes, ya que nos encontramos ante unos escenarios de un aspecto mucho más tétricos que en la serie principal. Pero quizá sea en la música donde más se note esto, ya que nos encontramos con una banda sonora que dista mucho de lo que suelen ser las producciones de origen nipón, aunque aún así, tampoco es muy destacable.
En este vídeo podeis ver como es el juego: