Hay videojuegos que se convierten en títulos de culto por razones realmente raras y pasan del olvido a la memoria colectiva en un abrir y cerrar de ojos. Ninja Golf fue un videojuego desarrollado por Blue Sky Sofware y lanzado por Atari en 1990 en Norteamérica sin demasiado éxito, de forma exclusiva para una consola que tampoco vendió especialmente, la Atari 7800, dentro de un mercado donde los 16 bits empezaban a emerger.
El juego fue un total desconocido, más allá del recuerdo de algún que otro jugador por lo extraño de su propuesta. Pero en esto, llegan los 2000, la popularización de YouTube y la llegada de los famosos «tops» de toda índole, y nuestro Ninja Golf empieza a ganar popularidad gracias a la rareza que supone su portada, donde se ve un ninja en un campo de golf, portando tanto una katana como una serie de palos de golf.
Y de esta manera, un juego que pasó sin pena ni gloria en su momento, llega a ser conocido mundialmente y, gracias a la emulación, probado por miles de personas. El título del juego nos da buena cuenta de lo bizarro de la propuesta pero no da lugar a engaño, esto es lo que nos trae el juego: ninjas y golf.
En un primer momento, el juego se plantea como un título de golf cualquiera, en la que hay una serie de hoyos a completar e iniciamos lanzando nuestra pelota de golf con nuestro palo correspondiente. La curiosidad se encuentra cuando tenemos que ir a la posición donde ha caido la bola ya que, ha falta de un carrito para trasladarnos, tendremos que ir a pie y una gran cantidad de enemigos nos salen al paso para impedirnos llegar, por lo que el juego se convierte en un beat’em up clásico de perspectiva lateral y desplazamiento horizontal.
Lo interesante está en que el tipo de enemigos y escenario dependerá de a donde hayamos lanzado la bola. Cuando realizamos el golpe, tenemos un pequeño mapa cenital donde indicamos dónde va a caer la bola y nuestro protagonista se trasladará en línea recta, por lo que el escenario depende de dicha trayectoria. Así, si vamos por el fairway nos encontraremos topos y si vamos por el búnker, serán serpientes las que nos ataquen. Independientemente del camino que tomemos, lo que no faltarán son ninjas enemigos que no dudar´´an en atacarnos.
En estas secuencias de acción, nuestro protagonista podrá tanto utilizar patadas y puñetazos para acabar con los enemigos, como estrellas ninja que tendremos en un número limitado pero que podremos ir reponiendo a lo largo de nuestra aventura. De igual manera, podremos encontrar items que nos hacer recuperar nuestra barra de vida o que nos dan invulnerabilidad durante un corto periodo de tiempo.
Al llegar a la zona del green de cada hoyo, cambia la perspectiva y nos deja una visión desde atrás de nuestro protagonista y tendremos que enfrentarnos a un dragón que no parará de escupirnos fuego. Tendremos que combinar nuestras habilidades de esquive para evitar el fuego con el lanzamiento de estrellas ninjas, infinitas en estas fases, para atacar al dragón, acabar con él y completar el hoyo.
Desde el punto de vista gráfico tenemos un trabajo muy loable dentro de las posibilidades gráficas de la Atari 7800, que no eran muchas en comparación con las consolas de la competencia que había en 1990. Tanto personajes como escenarios están bien definidos y ayudan a la inmersión dentro de las distintas zonas de nuestro itinerario. Caso distinto es el apartado sonoro, bastante escaso y poco destacable, pero algo común entre los títulos lanzados para la consola de Atari.
Ninja Golf era una propuesta más divertida de lo que pudiese parecer en un principio y quizá si hubiese sido pulido un poco más y lanzado para otras plataformas (la Atari 7800 se encontraba agonizando en aquella época), habría tenido una cierta relevancia en su momento. Sin embargo, como comentamos, el juego estuvo en los cajones del olvido durante muchos años
En este vídeo podéis ver cómo es el juego: