Dig It!, que no debe confundirse con un videojuego homónimo más reciente de simulación de construcción, es uno de esos casos curiosos en el mundo del videojuego, en el que un título toma mayor relevancia cuando pasa a las ventes de serie media que cuando se hizo su lanzamiento principal. De hecho, en 1996 cuando se lanzó, yo apenas oí hablar de él pero me hice con una copia del mismo unos cuantos años más tarde en la cesta de ofertas de algún centro comercial cuando lo distribuía Friendware a un precio económico.
De hecho, es esta edición de la única de la que prácticamente se encuentran referencias en Internet y, el hecho de que Pixel Painters Corporation, la desarrolladora del juego, cerrara sus puertas tras dos años de vida una vez lanzado el juego, hace sospechar que, en efecto, el lanzamiento principal fue mucho menos exitoso que el posterior a precios populares. De una manera u otra, lo cierto es que Dig It! merece ser destacado por ser uno de los plataformas más interesantes que salieron en PC a mediados de los 90.
En el juego tenemos el papel de Dug Kewl, un explorador que trabaja en el rancho Double Dug. Un día que nuestro protagonista se encuentra lejos de su lugar de trabajo, el malvado emperador que un día se ve sorprendido por el Supremo Spurkasauro, conocido como el Capitán Draggo, que destruye el rancho y secuestra a la compañera de nuestro protagonista, Dugette.
Tras este argumento lleno de clichés, se encuentra un desarrollo muy interesante del género de plataformas. Con inspiración en el mítico Dig Dug, se introducen elementos plataformeros de distinta índole que hacen una mezcla en un videojuego mucho más que correcto. Aparte del típico ataque con su arma, que en este caso inflará a los enemigos hasta hacerlos explotar, la principal característica de nuestro personaje es la de poder realizar excavaciones en ciertos puntos del escenario. De esta manera, para pasar de nivel, tendremos que encontrar una «X» que indica donde hay que cavar para llegar al siguiente nivel pero, entre medias, podemos encontrar otras «X» que nos lleven a diferentes lugares e incluso puntos ocultos que se pueden excavar señalados con una disimulada grieta.
Este desarrollo, que podría volverse monótono, sobrevive gracias a elementos que se introducen en distintos niveles. Aparte de items que nos permiten en ciertos momentos volar, mejorar el arma, ir bajo el agua o conseguir el supersalto. Estos elementos suelen ser esenciales para acabar cada nivel, ya que se introducen muchos elementos de puzzle que nos quebrarán la cabeza en más de un momento. De igual manera los enemigos no tienen un comportamiento homogéneo: algunos no pueden eliminarse, otros sueltan elementos arrojadizos, otros pueden generar otros enemigos más pequeños e, incluso, en algún nivel son formas fantasmales que no se pueden destruir de ninguna manera.
Aparte de lo anteriormente descrito, en ayuda para luchar contra la monotonía del desarrollo del juego, podemos ir coleccionando una serie de objetos que vamos encontrando en lugares ocultos, que terminan por activar minijuegos como ruletas, juegos de las parejas, etc… que nos den objetos extras. Esto hace muy llevadero un videojuego que es extraordinariamente largo y complicado, con un sistema de guardado solo permitido en ciertos puntos, lo que hace que sea capaz de darnos muchas horas de juego y os puedo asegurar que realmente entretenidas.
Valorar el apartado gráfico no es algo fácil dado su momento de lanzamiento y probablemente fue un handicap cuando los jugadores veían las capturas en la contraportada del videojuego. Si bien su diseño es correcto, divertido y se adapta perfectamente a las mecánicas de juego, lo cierto es que por aquella época de euforia 3D, un juego bidimensional lo iba a tener complicado y dentro de los que habían, por aquella época ya se había lanzado Rayman y Earthworm Jim que eran todo unos espectáculos visuales. El apartado sonoro se encuentra algo mejor, pero más o menos se mueve por los mismos estándares. Dig It! tiene más aspecto de un videojuego shareware de unos años antes, lo que destapa su desarrollo por una compañía no muy grande, pero eso no es impedimento para que sea un videojuego realmente divertido.
En este vídeo podéis ver cómo es el juego: