Centipede es un videojuego de Atari que llegaría a los salones recreativos en 1980. El título fue desarrollado por todo un clásico de los primeros años de la compañía norteamericana, Ed Logg (Asteroids, Lyle Rains) y que con Centipede se encontraba ante un reto muy especial: desarrollar uno de los primeros videojuegos en incorporar inteligencia artificial. Para ello contaría con la ayuda de Dona Bailey, toda una experta en esta materia y que, de esta manera, se convertiría en una de las primeras mujeres involucradas en el desarrollo de videojuegos.
La premisa del juego es muy simple, tendremos que ir pasando nivel a nivel, destruyendo en cada uno un ciempiés gigante que no dudará en devorarnos, amén de un sinfín de insectos de gigantescas proporciones con las mismas intenciones que el miriápodo.
Centipede es un shoot’em up vertical, en el cual nuestro personaje, representado por una cabeza de aspecto élfico, podrá moverse en el tercio inferior de la pantalla, disparando un laser de abajo arriba. El escenario es una gran extensión donde se encuentran colocadas una serie de setas y de la parte superior aparecerá un ciempiés que se ira moviendo de arriba a abajo y de forma lateral, teniendo en cuenta que al encontrarse con una seta variará el sentido de su movimiento.
Si disparamos a una parte del ciempiés, ésta desaparecerá y se convertirá en una nueva seta, lo que hace aún más errático el movimiento del ciempiés, Como podéis imaginar, las setas se convierten en un verdadero problema, ya que un área con muchas setas hará descender al ciempiés rápidamente, por lo que también podremos destruirlas si impactamos un cierto número de veces sobre ellas. Si el ciempiés llega al borde inferior de la pantalla, volverá a subir, pero se quedará en la zona de movimiento del personaje, pudiéndose regenerar.
El problema no se limita al ciempiés, ya que según vayamos avanzando en los niveles, aparecerán otro tipo de insectos como arañas, escorpiones (que vuelven venenosas las setas) o pulgas (que pueden generar setas). El movimiento de estos enemigos no responden tanto a patrones y se irán desplazando dependiendo del lugar donde se encuentre nuestro personaje.
A nivel técnico no supone ningún avance espectacular, más allá de los conatos de inteligencia artificial que se le implementaron a los insectos, bastante avanzados para la época. Si es cierto que el sistema de juego es más complejo de lo habitual y en muchas ocasiones daba respeto a jugadores inexpertos. Por lo demás, dentro de las posibilidades del hardware de Atari de la época.
A pesar de su peculiaridad, el juego funcionó bastante bien y surgieron infinidad de clones de otras compañías. Por su parte, Atari lanzaría el juego para sus consolas, mientras que a lo largo de los años, diversas desarrolladoras sacarían versiones para distintas plataformas, llegando las últimas hasta nuestros días para dispositivos móviles. Por otro lado, Ed Logg desarrollaría una secuela bajo el nombre de Millipede en 1982, de características similares pero con alguna meora técnica.
En este vídeo podéis ver cómo es el juego