Hammerin’ Harry (Daiku no Gen-san en Japón) sería lanzado en 1990, originalmente para recreativas. Junto a la saga R-Type, se convertiría en el videojuego más popular de su compañía desarrolladora, Irem Corporation. Con Hammerin’ Harry llegaría uno de los plataformas con el argumento más original. Una serie de obreros especuladores conocidos como los Rusty Nailers deciden derribar la casa del pobre Harry que se encuentra en Carpentersville. Como no podía ser de otra manera Harry se enfurece y decide salir a la calle armado con su mazo gigante, para dar buena cuenta de esos obreros. El juego, aunque no destacaba especialmente por su tecnología, sería uno de los más divertidos que han pasado por un salón recreativo, convirtiéndose en un auténtico título de culto con el paso de los años.
Hammerin’ Harry se desarrolla a lo largo de 6 niveles donde hay que ir acabando con obreros en distintas zonas de la ciudad. Tendremos dos principales ataques con nuestro mazo, por un lado podremos golpear directamente a los enemigos con él y por otro podremos producir un temblor de tierra golpeando el suelo y haciendo caer a los enemigos. Con la opción de poder saltar se completaba el funcional control que posee el juego.
Para complementar este sencillo manejo del personaje, contamos con una gran cantidad de mejoras que podemos recoger a lo largo del videojuego. Podemos recoger un casco de obrero que nos dara protección extra frente a los enemigos, guindillas que consiguen que aumentemos nuestra velocidad tanto al caminar como al golpear, unos pantalones azules que provocan que Harry salte el doble o recoger un mazo gigante. Por otro lado nos encontraremos con zonas de los niveles que requieren una interacción con elementos del entorno (por ejemplo, a veces es necesario golpear una bola de demolición para avanzar).
El dinamismo caracteriza al título. Una gran variedad de enemigos (carretilleros, escaladores, remachadores, etc…) nos aparecerán de los lugares más variopintos y tendran diversas maneras de atacarnos. Además, al final de cada nivel nos encontraremos con un obrero más duro, que hará las veces de jefe de final de fase. Por desgracia, una dificultad no excesivamente alta hacía al juego un poco corto, ya que con una cierta práctica podemos hacernos con él.
El apartado gráfico es bastante destacable, con unos diseños que nos hacen recordar a las series de animación japonesa de la época. Tanto los personajes como los escenarios están diseñados con un buen número de detalles y todo en clave de humor, que conseguirán arrancarnos una sonrisa de vez en cuando. En el sonido nos encontraremos con una curiosa banda sonora con reminiscencias japonesas y un catálogo de efectos de sonidos típicos de un videojuego de plataformas. Dos años más tarde aparecerían las versiones para dispositivos domésticos en exclusiva para Nintendo, con versiones tanto para la NES como para la Super Nintendo, cada una con sus respectivas limitaciones técnicas. En la actualidad se está preparando una nueva versión del juego para PSP, que aparecerá a lo largo de este año.
En este vídeo podeis ver como era el juego original:
Y en este otro como era la versión de NES:
A este no jugué. Me gustan las plataformas clásicas. A ver si le echo una partida.
Tremendo. Yo sí jugué en arcade y me resultaba realmente divertido. No esta entre los mejores, pero sí en ese 2º escalón 😉
¿Por qué en la portada del videojuego Harry parece Rambo?