Desde los tiempos de los 8 bits, cada lanzamiento de videoconsola ha solido ir acompañado de un videojuego de plataformas que lo abandere, sirviendo el protagonista de dicho juego como una especie de mascota de la máquina. De esta manera la Sega Master System tuvo a Alex Kidd , las consolas de Nintendo tendrían a Super Mario Bros. y la Sega Mega Drive vendría presentada por Sonic the Hedgehog . De igual manera, con la llegada de PlayStation, a finales de 1994, se buscó un juego de plataformas que consiguiera fama mundial y sirviera de enseña de la máquina. Este llegaría el 31 de Agosto de 1996 con Crash Bandicoot, desarrollado por la compañía estadounidense Naughty Dog, en un proyecto capitaneado por Joe Pearson y Charles Zembillas.
La historia se desarrolla en tres islas australianas y las protagoniza Crash, un bandicut (una especie de marsupial) mutado mediante los experimentos del doctor Neo Cortex. Dicho doctor se estaba dedicando a mutar a distintos animales de la isla en busca de hallar el soldado definitivo, destrozando la vida de todo el lugar. Crash fue deshechado por su escasa inteligencia, pero es lo suficientemente valiente para ir al rescate de Tawna y acabar con los planes de Neo Cortex. Para ello cuenta con la ayuda del espíritu Aku Aku, que le guiará en la intensa aventura por las antípodas.
Crash Bandicoot se encuentra dividido en 25 niveles a lo largo de las tres islas, contando además con dos niveles secretos y seis encuentros con los distintos jefes (Papu Papu, Ripper Roo, Koala Kong, Pinstripe Potoroo, Nitrus Brio y Neo Cortex). El videojuego presentaba un entorno en tres dimensiones pero que presentaba un desarrollo lineal y una perspectiva desde detrás del personaje la mayor parte del juego. Crash cuenta con dos ataques principales: de salto y de giro (al más puro estilo Taz-Mania).
Aparte de para acabar con los enemigos, Crash puede utilizar sus giros para ir destrozando las cajas que se encuentra por el camino. En ellas encontrará diversas ayudas para su aventura como fruta (si recogíamos todas las del nivel sin perder una vida conseguíamos una gema) o máscaras, que nos harán invulnerables un tiempo limitado. En ocasiones también tendremos que ir montado a lomos de un cerdo o ser perseguidos por un carro rodante.
Gráficamente fue bastante sorprendente por la calidad de sus texturas y la fluidez con la que se movía en las tres dimensiones. Aunque contaba con la lacra de la linealidad, si que sirvió como punto de partida para los plataformas tridimensionales que empezaban a salir al mercado. A esto le acompañaba una excelente banda sonora que nos dejaba inmerso en la selva australiana.
Aunque en un principio la crítica se mostró algo exceptica, su gran éxito entre el público hizo que toda la prensa especializada se rindiera a sus pies y comenzara una exitosa franquicia. En 1997 se publicaría Crash Bandicoot 2: Cortex Strikes Back y la trilogía de Naughty Dog se completaría en 1998 con Crash Bandicoot 3: Warped. Dicha compañía también crearía un juego de conducción bajo el nombre de Crash Team Racing. Naughty Dog abandonaría el proyecto y lo retomarían diversas compañías que lanzarían diez títulos en siete años para diversas plataformas: Crash Bash, Crash Bandicoot: The Wrath of Cortex, Crash Bandicoot: The Huge Adventure, Crash Bandicoot 2: N-Tranced, Crash Nitro Kart, Crash Bandicoot Purple: Ripto’s Rampage, Crash Twinsanity, Crash Tag Team Racing, Crash Boom Bang y Crash of the Titans.
En este video podeis ver como era el juego:
un autentico vicio,me encanta,aun hoy lo disfruto…
Un juego para el recuerdo relativamente reciente.
Juego entretenido y vitalista a más no poder.
Gracias por ponerlo.
Gran juego de plataformas… o por lo menos los primeros.
Lástima que los últimos sean una auténtica basura.
Gracias por poner estas joyitas.
chupalo